El ensayo clínico es conocido como ACTIV-2, se puso a prueba en agosto y sus resultados comienzan a sorprender a los investigadores, pero hay un problema, muy pocas personas desean ser voluntarios para someterse a las pruebas de anticuerpos.
Roberto Aguirre, de AGA Clinical Trials, dice: “Son muy efectivos muy pocos efectos secundarios o ninguno y la persona se recupera básicamente a los cuatro días”
Bajo el nombre de “Ensayo de anticuerpos monoclonales para pacientes ambulatorios ACTIV-2” el centro de investigación AGA Clinical Trials, de Hialeah, se suma al esfuerzo por ganarle la carrera al COVID-19.
“Son anticuerpos producidos farmacológicamente, los cuales buscan tratar inmediatamente al COVID-19 y evitar que exista una resistencia más adelante”, dice Aguirre.
Los investigadores reconocen que es muy similar al cóctel experimental de anticuerpos monoclonales de Regeneron, que recibió el presidente Donald Trump para contrarrestar el COVID-19.
“En este caso inicial sería tratar en el estado agudo a los pacientes que están con mayor riesgo de muerte, es decir un diabético, una persona obesa”, dice Aguirre.
El ensayo clínico se ha probado en 300 pacientes a nivel nacional de los cuales 12 son del condado Miami Dade, según los investigadores, encontrar voluntarios se ha convertido en una tarea titánica.
Local
El ensayo clínico se realiza en todo el país, bajo el auspicio del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas.
“La base para todos estos anticuerpos es el plasma, entonces lo que hace la farmacéutica es estudiarlo a fondo, manipularlo y crear para que exista consumo suficiente para todos los pacientes que lo necesitan”, asegura Aguirre.
El único requisito para ser voluntario es presentar síntomas del COVID-19, como tos, fiebre y falta de oxígeno.