La sensación de que Argentina se juega el futuro en las elecciones este domingo está presente en cada rincón del país sudamericano. Así lo sienten los mismos argentines, por ello los más jóvenes alzan su voz en este momento.
En la nación que tiene 45 millones de habitantes es muy amplia la participación de los jóvenes en la política. No sólo para quienes ya tienen edad para votar el asunto es polémico, desde la escuela secundaria hay debates, participación y foros donde se habla y se proyecta la Argentina del futuro.
Miguel Angel Centeno, estudiante de escuela secundaria, confiesa que le angustia “que se estén atacando dos por el poder, porque las personas son las que eligen. El pueblo es el que elige al que quiere que gobierne en el país”.
Los más jovenes están comprometidos con un modelo de hacer política diferente. Más integradora, con una visión de país integrador y sin “grietas sociales”. El estudiante Thiago Barros, reconoce que no “estamos unidos como sociedad … me gustaría que sea diferente”.
Macristas y kirchneristas serían como Caín y Abel, no hay ni siquiera un tema que los acerque para sacar a este país adelante, este es según la juventud, uno de los temas que más les preocupa.
Milagros Martinoti es una adolescente comprometida con la política alega que “aunque unos piensan que por votar a Cristina piensan que todo va a bajar. El dólar a 20 peso, y otras cosas van a bajar, pero son hipócritas porque no va a bajar nada. Pero muchos se dejan guiar por eso”.
Defender una u otra propuesta ha llevado a que familias y amigos de toda la vida se alejen. El enfrentamiento empujó a algunos jóvenes a una postura anti partidista, que no cree en los políticos, ni en la manera de hacer política.
A Malena Marzal, vecina del barrio de la Boca, le parece que estamos tratando de hacer un cambio, “una revolución desde lo social, lo económico y lo politico, para que las cosas cambien y avancen. Es necesario”.
Este domingo, la pelea electoral no se dará sólo en las urnas. La desconfianza entre los principales candidatos es tan alta que prácticamente hay dos ejércitos de fiscales en la oposición y el gobierno, que controlarán el recuento de votos, después que el oficialismo sugiriera que en las primarias de agosto hubo fraude.
Y por esa manera de hacer política es que los más jovenes reaccionan. Un estudio de la Universidad de Flores, en Argentina, sobre estudiantes de la secundaria, demostró que ellos ven a los políticos con una imagen negativa por la manera que tienen de hacer su trabajo y el estilo convencional.
