Varias personas salieron desde el sur de la Florida hasta Nueva York, para protestar frente al edificio de Naciones Unidas.
Anisley no ha descansado desde el 11 de julio, fecha en que los cubanos salieron a protestar y el exilio tomó las calles en su apoyo conversamos con ella antes de partir. Dice que “ahora que será diferente esta vez. La diferencia es que pondremos nuestra vida en riesgo, haremos huelga de hambre, ante la ONU, la organización más grande del mundo. Para ser escuchados. Ya vemos que con las marchas no nos escuchan, entonces nuestras vidas a cambio de la libertad de Cuba”
Acamparon cerca de la entrada, en la sede de Manhattan. Desean que esta organización haga algo por los cientos de cubanos que aun, permanecen encarcelados por protestar pacíficamente.
Otra de sus preocupaciones es el coronavirus en la isla, donde el número de muertos y contagiados se ha disparado, mientras el oficialismo culpa a la población y los médicos.
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Dicen que piensan quedarse ahí hasta que sean escuchados.
