El nuevo coronavirus COVID-19 continúa su propagación por el mundo y por Estados Unidos, donde las cifras de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) aumentan diariamente, aunque se insiste en que el nivel de propagación sigue siendo bajo en el territorio nacional.
Ante la novedad del COVID-19 manejar información para hacer frente a la enfermedad es fundamental. Telemundo te responde siete preguntas clave sobre el nuevo coronavirus.
¿Qué es el coronavirus?
El nuevo coronavirus 2019 (COVID-19) es un virus identificado como la causa de un brote de enfermedad respiratoria detectado por primera vez en Wuhan, China, según explica el CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU) en su página web.
Se habla de un nuevo coronavirus (CoV) porque no había sido identificado con anterioridad. El virus que está causando la enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19) no es el mismo que los coronavirus que circulan comúnmente entre los seres humanos y que causan enfermedades leves, como el resfriado común.
¿Cuál es el origen del coronavirus?
Local
Según el CDC, el análisis del árbol genético de este virus indica que se originó en murciélagos, pero todavía no se sabe si el virus saltó directamente desde murciélagos o hubo un animal hospedador intermedio. El SARS-CoV, otro coronavirus que al surgir infectó a personas, provino de civetas (gatos almizcleros), mientras que el MERS-CoV (coronavirus del síndrome respiratorio de Oriente Medio), que también surgió e infectó a personas, tuvo su origen en camellos.
Los organismos de salud pública a nivel global aún trabajan para identificar la fuente animal original del virus que causa el COVID-19.
¿Cuáles son los síntomas?
Los pacientes con infección confirmada de COVID-19 han tenido una enfermedad respiratoria de leve a grave con síntomas de:
- Fiebre.
- Tos.
- Dolor de garganta.
- Falta de aliento o dificultad para respirar.
Los CDC creen en este momento que los síntomas pueden aparecer en tan solo dos días o hasta 14 después de la exposición.
¿Qué hacer para prevenir el contagio?
Actualmente no existe una vacuna, así que la mejor forma de prevención es evitar exponerse a personas con el virus y tomar medidas básicas que son muy similares para prevenir la propagación de enfermedades respiratorias.
- Lávese las manos con frecuencia con agua y jabón durante al menos 20 segundos. Si no hay agua y jabón disponibles, use un desinfectante para manos a base de alcohol.
- Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca con las manos sin lavar.
- Evitar el contacto cercano con personas que están enfermas.
- Quédese en casa cuando esté enfermo.
- Cubra su tos o estornude con un pañuelo desechable, luego tírelo a la basura.
- Limpie y desinfecte objetos y superficies que se tocan con frecuencia.
¿Es recomendado usar mascarillas?
Los CDC no han hecho recomendaciones para que las personas que no están enfermas usen mascarillas para protegerse de enfermedades respiratorias, incluso del COVID-19.
Las personas que presentan síntomas del COVID-19 deberían usar mascarillas para ayudar a prevenir la propagación de la enfermedad a los demás. El uso de mascarillas es también esencial para los trabajadores de la salud y las personas que cuidan de alguien en un entorno cerrado.
¿Existe tratamiento para el COVID-19?
No existe un tratamiento antiviral específico aprobado para el COVID-19, pero los médicos pueden recomendar solo los remedios habituales para cualquier enfermedad viral: descanso, medicamentos para reducir el dolor y la fiebre, así como líquidos para evitar la deshidratación.
Las personas infectadas deben recibir atención de apoyo para ayudar a aliviar los síntomas. Para casos severos, el tratamiento debe incluir atención para apoyar las funciones vitales de los órganos.
Las personas que piensan que pueden haber estado expuestas al COVID-19 deben comunicarse con su proveedor de atención médica de inmediato.
¿El COVID-19 afecta más a las personas mayores?
Según la OMS, puede infectar a personas de todas las edades, si bien se ha observado que las personas mayores y las que padecen algunas enfermedades (como el asma, la diabetes o las cardiopatías) tienen más probabilidades de enfermarse gravemente cuando adquieren la infección.
La OMS aconseja a las personas de todas las edades que tomen medidas para protegerse del virus, por ejemplo, mediante una buena higiene de manos y respiratoria.
Fuente: Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), National Center for Immunization and Respiratory Diseases (NCIRD), Organización Mundial de la Salud.