Más allá de la construcción del muro y de la contratación de más agentes fronterizos, los inmigrantes que contemplen cruzar la frontera de EEUU con México de forma ilegal enfrentan ahora un nuevo desafío — el alza en las tarifas de los traficantes de personas.
De acuerdo a un informe dado a conocer este mes por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el precio que piden los llamados “coyotes” para cruzar a una persona ha aumentado aproximadamente en un 130% desde noviembre del 2016, cuando Donald Trump fue elegido a la presidencia.
La tarifa oscila de entre $3,500 y $8,000 para ser guiado por la frontera.
El aumento se debería a las nuevas políticas estadounidenses contra los inmigrantes indocumentados, incluyendo el alza en las detenciones.
“Continuamos nuestro compromiso a llevar adelante las leyes migratorias de nuestro país de manera justa, imparcial y humana”, dijo en el comunicado John F. Kelly. “Seguiremos atentos para responder a cualquier cambio en estas tendencias, como así de la cifra de cruces ilegales entre marzo y mayo, cuando típicamente aumentan”.
Otros números compartidos por DHS indican que se redujo en un 40% las detenciones de inmigrantes indocumentados en la frontera sur durante el primer mes de Trump en la presidencia.