El portavoz del congresista Carlos Giménez nos confirmó que el centro de refugios para niños inmigrantes de Homestead reabrirá. Recordemos que, aunque se le conoce con ese nombre, está ubicado en un área no incorporada de Miami Dade, justo el distrito del congresista.
Thomas Kennedy, Coordinador de la Florida de United We Dream, dijo que “hoy nos despertamos con un disgusto la noticia que la administración de Biden está reabriendo el centro de detención para jóvenes inmigrantes Homestead, un centro que habíamos logrado cerrar bajo la administración de Trump”.
Con mucha indignación y preocupación han reaccionado varias activistas proinmigrantes en la Florida, al escuchar sobre la reapertura de este polémico centro de detención de niños y adolescentes de Homestead, que fue cerrado en agosto del 2019 tras varias protestas.
Marina Martínez, miembro de la organización FLIC (Florida Immigrant Coalition), dijo: “Hay muchas otras alternativas en vez de detención para el cuidado de niños, deben ser reubicados con familiares especialmente en una pandemia. Mi reacción es un poco de ira., después de todo queremos una administración proinmigrante eso fue lo que prometimos y tenemos que hacer las cosas como lo dijimos. Yo critico al que sea. Y me parece un error, tengo que entender el porqué”, dijo la congresista Anette Tadeo.
Al momento de su clausura, este centro de detención albergaba hasta 1,200 niños y adolescentes que entraron a los Estados Unidos sin su madre o su padre biológico, convirtiéndolo en el centro más grande del país para niños inmigrantes no acompañados.
“No vamos a dejar pasar y olvidar lo que pasó en el centro de Homestead, otra vez, había casos de acoso sexual eso no lo queremos y no debe pasar otra vez”.
La congresista Frederica Wilson, dijo:
Local
“Creo que es terrible, no estoy segura si allí tendrán distancia social, hay que averiguar cuántos niños van a ir, de dónde vienen, porqué los están poniendo allí, porqué no los están reuniendo con sus familiares. Quiero recalcar que estos centros están manejados por contratistas privados y esto se ha convertido en un gran negocio en que compañías hacen millones y millones de dólares en detener a estos pobres jóvenes inmigrantes”.
Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, habló hoy sobre el funcionamiento de este tipo de centros, dice:
“No es una réplica de la administración pasada, no vamos a expulsar a los menores no acompañados, es inhumano, necesitamos encontrar lugares seguros por el COVID-19, para que puedan tener acceso a servicios de educación y salud, nuestro objetivo es reunirlos con sus familiares.
Habrá que ver cómo se manejará este centro, aún no está claro si la empresa CALIBURN, contratada por la administración de Trump seguirá como operador de esta instalación.
