El gobernante cubano Raúl Castro reiteró este lunes que el "largo proceso de normalización de las relaciones" con Estados Unidos culminará cuando, entre otras medidas, el país norteamericano devuelva la base de Guantánamo y pague compensaciones por el embargo comercial.
Castro intervino por primera vez en el debate anual de alto nivel en la Asamblea General de la ONU, con un discurso en el que expresó su solidaridad con varios gobiernos de la región y se refirió a la decisión de Cuba y EE.UU. de normalizar sus vínculos.
"Tras 56 años de heroica y abnegada resistencia del pueblo cubano, quedaron restablecidas las relaciones diplomáticas y las embajadas en las respectivas capitales", afirmó Castro.
Esa normalización fue anunciada en diciembre pasado desde Estados Unidos y Cuba y, como parte del proceso, en agosto último los dos países reabrieron sus respectivas embajadas.
Pero la normalización de los vínculos acabará cuando, entre otras medidas, "se ponga fin al bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba".
También "cuando se devuelva a nuestro país el territorio ocupado ilegalmente por la Base Naval de Guantánamo, cesen las transmisiones radiales y televisivas y los programas de subversión y desestabilización contra Cuba y se compense a nuestro pueblo por los daños humanos y económicos que aún sufre", agregó Castro.
Mientras esa situación persista, el líder cubano afirmó que Cuba seguirá presentando un proyecto de resolución ante la Asamblea General de la ONU en el que se pide el fin "al bloqueo económico, comercial y financiero" impuesto por Estados Unidos contra la isla, y que suele tener un amplio respaldo.
En su discurso, Raúl Castro expresó su solidaridad con Venezuela frente a "los intentos de desestabilizar y subvertir el ordenamiento constitucional", y también con Ecuador, ya que su presidente, Rafael Correa, "se ha convertido en el blanco del mismo guión de desestabilización aplicado contra otros Gobiernos progresistas de la región".
También expresó su convicción de que "el pueblo de Puerto Rico merece ser libre e independiente, luego de más de una centuria sometido a la dominación colonial".
Asimismo, se solidarizó con Argentina por su "legítimo reclamo de soberanía" sobre las Malvinas y otros enclaves del Atlántico Sur.
Raúl Castro también mencionó el fenómeno de la emigración que se está registrando en el Mediterráneo, que atribuyó a "las acciones de desestabilización que la OTAN promovió y ejecuta en países del Medio Oriente y África del Norte", y al "subdesarrollo y la pobreza imperante en países del continente africano".