Según una encuesta con datos del Buró del Censo, el 51 por ciento de los inquilinos en Florida se enfrenta al desalojo. La imposibilidad de pagar la renta es un problema de dos caras.
Carlos J. Linares, agente de real estate de United Ddream dice que “Por un lado los inquilinos se quedan sin un lugar donde vivir, y los propietarios necesitan esta renta, que paga los inquilinos, para pagar servicios, como condominio los taxes. El préstamo si no es una propiedad completamente liquidada”.
Para muchos en busca de tiempo y cómo resarcir pérdidas, la esperanza es que el gobernador renueve la moratoria de desalojos que vence el primero de agosto.
Annette Taddeo, senadora estatal de la Florida, dice que “Estamos en discusiones con la oficina del gobernador por si no lo va a hacer en su totalidad como lo hecho hasta ahora que al menos lo haga para ciertas personas, cierta ayuda. Ya recibimos cierto dinero para ayudar a la gente de bajos recursos”.
Pero la posibilidad de ayuda con la renta en el sur de Florida es crítica.
“No recibimos el porcentaje que deberíamos recibir, de acuerdo a nuestra población, de acuerdo a los números que tenemos y de acuerdo a los afectados que estamos con respecto a los empleos”, dice Taddeo.
En medio de recursos limitados, Camillus House administra para el condado de Miami Dade la línea de ayuda a personas que tienen una orden legal de desalojo que los pone al punto del desamparo.
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“Nosotros vamos a intervenir, tratar de hablar con el dueño del apartamento para ver si podemos llegar a un acuerdo, pagar lo que se le debe para que su familia pueda permanecer en ese hogar. Y si no hay otra alternativa, ir a otro apartamento u otra casa”, dice Hilda Fernández, CEO de Camillus House.Pero la
situación se complica para las personas a quienes se les vence el alquiler, tienen que mudarse y continúan sin empleo.
“No tienen la opción de rentar otro lugar porque sin trabajo, sin sueldo, no les van a dar la opción de poder alquilar otra propiedad”, dice Linares.
