Este fue el fallo de una corte de apelaciones que, por el momento, detiene lo que ya se había decidido precisamente en los tribunales: la apertura del puente de la calle 170 del noroeste, que conecta a Hialeah con Miami Lakes. Es decir, por el momento seguirá cerrado.
Tras varios años de controversia entre ambas ciudades, el condado decidió tomar cartas en el asunto.
Su postura fue a favor de abrir el puente, porque afecta a los residentes de nuevas comunidades en el oeste Hialeah, quienes no cuentan con las vías suficientes para entrar y salir.
Un juez les dio la razón y ordenó la apertura. Pero Miami Lakes apeló.
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El argumento de los abogados de la ciudad para presentar esta apelación, es que el condado no podía tener la última palabra en el asunto, porque así lo establece un documento firmado en el 2003.
Cuando el condado intervino en el 2017, fue porque Esteban Bovo, entonces comisionado, presentó una resolución a favor de la reapertura. Ahora que es el alcalde de Hialeah, defiende con más fuerza su postura. Así nos dijo en comunicado: “respeto la decisión, pero sé lo mucho que el cierre de este puente y el de la 154 están afectando con tráfico excesivo y retrasos a los residentes de la zona.
Por su parte, el alcalde de Miami Lakes Manny Cid, apuesta por una decisión que beneficie a ambas ciudades.
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“Vamos a trabajar juntos. Nadie gana cuando estos temas van a la corte”.
“Nosotros hemos tratado de hablar con ellos y la conversación es: no, no queremos puente abierto”, dijo Pepe Díaz, presidente de la junta de comisionados.
Díaz no solo le da la razón a Hialeah, sino que la semana pasada presentó una resolución similar a la de Bovo, para que también se abra el puente de la 154. El tema será abordado en las próximas semanas.
