Aunque los reclamos dentro y fuera de Cuba, después del 11 de julio, se enfocan en exigir la libertad del régimen, el interés mostrado por el gobierno estadunidense de Biden, por aumentar su personal diplomático en la isla, podría beneficiar el estancado programa de Reunificación Familiar, conocido como Parole, para miles de cubanos.
Giselle Rosales, residente en Cuba espera por reunificación, dice: “años de espera, años de sufrimiento, niños creciendo lejos de sus padres”.
Vasili Hernández, abogado de inmigración, dice: “el beneficio sería sacar del atraso burocrático qué hay en el sistema de inmigración, 22 mil casos de parole de reunificación familiar lo cual conlleva que cada caso podría tener 2,3, y hasta 5 familiares”.
Obligados a viajar a terceros países, después del cierre de la embajada americana en La Habana, en 2017, bajo el mandato de Trump, por los supuestos ataques sónicos, y gastar miles de dólares entre trámites consulares y pasajes. La familia cubana dice sentirse esperanzada.
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Erick Villafuente, residente en miami espera por reunificación: “yo mismo vivo en Miami y estoy separado de mi familia, llevo vivo en Miami y llevo cerca de 3 años que le puse mis papeles y todavía nada”.
Ibis Rodríguez, residente en Miami espera por reunificación, dice: “4 años ya hace camino a 5 que estamos esperando por una respuesta del departamento de estado”.
Ibis reclamó a su hermana y a sólo un mes para la entrevista, su proceso quedó en pausa, dice: “es algo humanitario y es algo que nos deben, porque cuando hicimos estos procesos, lo hicimos legal”.
Local
Respuestas que no llegarían muy pronto, según dijo Juan González, asesor del presidente Biden para Latinoamérica.
“Si lo podemos hacer de forma segura, lo haremos, pero tardará tiempo, el enfoque ahora tiene que ser el pueblo cubano como los podemos apoyar a ellos e incrementar la presión sobre el régimen”, dice.
“Es una solución legal, burocrática y administrativa de inmigración que el beneficio directo es humanitario”, Vasili Hernández.
Un grito desesperado que la semana pasada también se escuchó en Washington a donde acudieron decenas de familias para pedir por sus procesos de reunificación.
Niubis Robaina, miembro de la organización CAMAFS (Cuban American Movement Against Family Separation)
“Tenemos menores de edad que llaman a sus padres todos los días preguntándole cuando van a estar juntos, tenemos padres enfermos, niños que necesitan tratamientos para el cáncer, niños down, los hermanos que están separados, esto se trata de humanidad, esto no es beneficio para Cuba”.
