Una familia del sur de Florida está en una carrera desesperada buscando un donante vivo de riñón, que pueda ofrecer este órgano para uno de sus hijos, pero también han creado un proyecto que puedo ayudar a otros niños en esta misma situación.
Este es JP, un niño como otro cualquiera a juzgar por estas imágenes; sin embargo, enfrenta un reto: padece de enfermedad renal terminal. Y eso también es un desafío para la familia.
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Jessica Ortiz, madre de “JP”, dice:
“Se pasa 12 horas al día conectado a una máquina. Tratamos de hacerlo por la noche, para que el niño se sienta más normal, en su cuna; pero él no duerme 12 horas. Por lo que se queda todo el tiempo ahí, atrapado, en su cuna”.
Está en la lista de trasplante hace dos años, pero aún no llega el riñón que necesita.
“El problema de la lista es que es por edad, tamaño. Tienen que encontrar un riñón que sea perfecto para el niño y hace dos años hemos estado en la lista y aún no hemos tenido suerte con eso”, dice Ortiz.
El 30% de los riñones donados en Estados Unidos provienen de donantes vivos: o sea una persona viva que decide donar uno de sus riñones. En comparación con el riñón de un donante fallecido, el trasplante del órgano que proviene de una persona viva tiene más posibilidades de éxito.
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Y por eso estos padres han creado el proyecto Living Donor para su hijo y otros niños en la misma situación.
John Paul Medina II, padre de “JP”, dice:
La misión de “Living Donor Project” es ayudar a niños como mi hijo a buscar donantes vivos de riñón. Puede ir a la página de nosotros
Livingdonorproject.org, y ahí puede ver el video de “JP”, llenar el formulario, que es la primera parte para que nosotros podamos ver si la persona es un candidato adecuado o no.
En un gesto altruista, más de 500 personas han llenado el formulario, pero encontrar al donante más adecuado no es tarea fácil, cuando deben presentar sólo 3 candidatos finales al centro de trasplante.
“No puede ser una persona como yo, que yo mido 5, 11. Tiene que ser mucho menos, para que un riñón quepa en el cuerpo del niño”, dice Medina.
Y así desde su plataforma, el Proyecto “Living Donors”, estos padres continúan la búsqueda del riñón tan necesario para que su hijo pueda crecer.
La familia de “JP” espera que el Proyecto “Living Donor” pueda ayudar también a otros niños que están en su situación, para darles una mejor calidad de vida y una nueva esperanza. Seguiremos pendientes. Soy Harold Santana ahora volvemos a los estudios con ustedes.
