Aunque el condado Miami Dade quiere mantener esta modalidad, algunos negocios en Doral ya fueron notificados de que a final de este mes de junio tienen que remover mesas, carpas y contenedores que se encuentran en el exterior.
El cierre de muchas calles en el condado pronto podría terminar. Estas áreas habían sido destinadas para ayudar a los restaurantes a expandir su capacidad durante la pandemia.
“Oficialmente los contenedores se van a recoger a partir del 28 de junio y para iniciar debemos tener nuestros muebles otras veces y retirar”, advierte Patricia Ramos, Gerente de Operaciones del Restaurante Pisco y Nazca.
"Seguramente nos va a pegar, porque van a ver personas que prefieren estar afuera y si tenemos una capacidad limitada para sentarnos, van a escoger ir a otro lado”, precisa Ramos.
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El uso de estos espacios estaba permitido por medio de permisos especiales debido al COVID-19, pero con la nueva orden ejecutiva del gobernador de Florida algunas órdenes de emergencia expiran el primero de julio incluyendo los cierres de las calles.
Elieen Higgins, comisionada del Condado Miami-Dade, dice estar “muy preocupada porque estos espacios, estacionamientos, calles, aceras, son parte de nuestra recuperación económica”.
Líderes del condado ahora muestran su desacuerdo con esta decisión que según comisionados no aprobaron. Sin embargo, el departamento de obras públicas y transporte dice que las ciudades pueden solicitar estos permisos, pero esta vez serían bajo una categoría que no es de emergencia.
Local
La noticia le trae un sabor amargo a muchas familias que se han beneficiado de esta nueva normalidad, y que según el condado, también ha ayudado a levantar la economía.
La alcaldesa Daniella Levine Cava envió un comunicado diciendo que están comprometidos en trabajar con todos los posibles afectados en las ciudades, haciendo todo lo posible para extender creativamente los cierres de las calles.
