“No son las mejores condiciones”, dice una cubanoamericana que está en la puerta del lugar sin entrar, porque las autoridades cubanas quieren ponerlos en habitaciones de 12 personas.
Así amanecieron cubanos residentes en el exterior luego de ser trasladados del aeropuerto de La Habana a la Escuela de Enfermería del Cotorro para una cuarentena.
Pero de pronto las condiciones cambian. Una doctora ofrece que sean 6 en cada habitación. El residente en España se niega y dice que ha estado aislado. Pero además de la propuesta de aislamiento en hacinamiento, había otro problema.
Residente en España dice que les dijeron que no había comida, quizás sólo una merienda y que mañana no se sabría.
En tanto, este miércoles continuaron regresando a Miami los cubanoamericanos y residentes en Estados Unidos que se encontraban en la isla.
Guadalupe Breijo, una cubana residente en Miami dice que “los van a poner en un hotel con una enfermera y una doctora y le darán desayuno almuerzo y comida, pero yo no quería eso yo quería venir para mi casa”.
Pero los repatriados no pudieron salir del país por orden del gobierno cubano. Y es que este grupo está sufriendo ahora las consecuencias de dejar sus privilegios en Estados Unidos y ponerse a disposición de las autoridades y leyes cubanas al repatriarse.
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Aún hoy, esa es la realidad luego de que Cuba anunciara que “regularía” el derecho a viajar. Y el panorama ahora es de largas colas y aglomeraciones que podrían propagar el coronavirus, porque es necesario comer. Es necesario tener un jabón para bañarse. Es necesario ir al médico y no son las mejores condiciones.
