Aerolíneas de EEUU cancelaron más de 3,500 vuelos en todo el país este fin de semana y retrasaron otros tantos debido al clima en Florida y otros problemas operativos.
FlightAware, un sitio web que rastrea vuelos, notó importantes interrupciones en varios aeropuertos de Florida, incluido Miami, Fort Lauderdale, Tampa y Orlando, así como en Baltimore, Nueva York y otros en el resto del país.
JetBlue, Southwest, Alaska Airlines, Frontier, Spirit y American Airlines fueron las aerolíneas más afectadas, según FlightAware, con JetBlue y Spirit cancelando un tercio de los vuelos programados para el domingo.
En estados como Florida se reportaron tormentas este sábado. Para el domingo varias aerolíneas dijeron que las operaciones estaban volviendo a la normalidad.
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La avalancha de cancelaciones llegó cuando los viajes aéreos se están recuperando de la pandemia, con una fuerte demanda de vuelos por las vacaciones de primavera. Los viajeros se quejaron de esperar en las filas durante horas para reprogramar sus vuelos cancelados luego de quedar varados durante días.
“El clima severo en el sureste y los múltiples programas de retrasos en el control del tráfico aéreo han creado impactos significativos en la industria”, dijo un portavoz de JetBlue en un correo electrónico.
“Las cancelaciones de hoy nos ayudarán a restablecer nuestra operación y mover de manera segura a nuestras tripulaciones y aeronaves a su posición”, agregó.
Local
Southwest Airlines citó la "congestión del espacio aéreo y el clima" en Florida, así como un "problema tecnológico". Canceló alrededor de mil vuelos durante el fin de semana, pero dijo que a partir de la 1 p. m., hora del este, no tuvo más cancelaciones el domingo.
Alaska Airlines parecía estar lidiando con un problema diferente. La aerolínea dijo que las cancelaciones de vuelos de fin de semana que comenzaron el viernes afectaron a más de 37,000 clientes y que eran posibles más cancelaciones.
La aerolínea se negó a decir por qué canceló los vuelos, pero se refirió en su comunicado a las negociaciones del contrato con sus pilotos. Los pilotos fuera de servicio protestaron en varias ciudades de EEUU por el estancamiento de las negociaciones, pues alegan que llevan tres años sin nuevo contrato.
“Alaska Airlines no planificó adecuadamente el aumento de la demanda de viajes y no tomó las medidas necesarias para garantizar que retuviera a los pilotos”, dijo el sindicato de pilotos en un comunicado.
