Venezuela

Militares rebeldes logran salir de Venezuela

Los tenientes coroneles Illich Sánchez y Rafael Soto se negaron a revelar cuándo salieron del país.

Telemundo

Dieciséis militares venezolanos que se habían rebelado contra el gobierno de Nicolás Maduro y que llevaban meses refugiados en la embajada de Panamá en Caracas lograron salir del país. 

The Associated Press habló de forma exclusiva con los líderes del grupo, quienes ofrecieron la primera versión detallada de la manera en que tramaron un alzamiento militar que dejó al descubierto el declinante respaldo hacia Maduro entre las filas armadas.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sufrió este sábado un intento de atentado cuando encabezaba un acto oficial que fue interrumpido debido al estallido de varios “artefactos voladores tipo dron”, dijeron las autoridades.
Maduro, de 55 años, se encuentra bien y siete guardias nacionales resultaron ilesos, dijo el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, en una transmisión de la televisora estatal.
Los hechos ocurrieron en la céntrica avenida Bolívar.
Cuando los “artefactos voladores de tipo dron” fueron activados en la cercanía de la tarima presidencial y en algunas zonas del desfile, agregó Rodríguez.
El incidente tuvo lugar cuando Maduro pronunciaba un discurso ante cientos de militares con motivo del aniversario de la Guardia Nacional.
El acto fue suspendido abruptamente y solo se observó, durante una cadena de radio y televisión, cómo algunos de los uniformados rompían filas y corrían hacia un extremo de la vía.
En medio de la transmisión se observa a la primera dama, Cilia Flores, que estaba a un lado de Maduro, que se sorprende ante las explosiones, de la que no se tiene audio ni imágenes, y comienza mirar hacia el cielo junto al resto de las autoridades civiles y militares que participaban en el acto, y poco después se corta la transmisión oficial.
En la tarima junto a Maduro, además de Padrino y la primera dama, Cilia Flores, había representantes de todos los poderes públicos del país.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, fue captado en cámara este sábado al abandonar de emergencia un acto por la conmemoración de los 81 años de la creación de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), en el centro de Caracas (Venezuela). EFE
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro (3i), fue captado en cámara este sábado al encabezar un acto por la conmemoración de los 81 años de la creación de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), antes de ser evacuado de emergencia, en el centro de Caracas (Venezuela). EFE
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, emitió este sábado una "condena enérgica" contra "terroristas" de Venezuela, por el atentado sufrido por el gobernante venezolano Nicolás Maduro, durante un acto con militares en Caracas.
El presidente Maduro dijo tras el atentado que detrás del hecho se encuentra Juan Manuel Santos, presidente de Colombia, y "terroristas" de Miami.
La Presidencia de Colombia aseguró este sábado que carece de base la afirmación del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, de que el jefe de Estado colombiano, Juan Manuel Santos, es el responsable del supuesto atentado de esta tarde en su contra en Caracas.
TE PUEDE INTERESAR: Tragedia: salva a su nieto pero lo confunden con el malhechor.

Por razones de seguridad, los tenientes coroneles Illich Sánchez y Rafael Soto se negaron a revelar exactamente cómo o cuándo salieron de Venezuela.

Revelaron solamente que viajaron en grupos pequeños como parte de una “operación militar” clandestina que contó con el apoyo de docenas de soldados de rangos bajos y sus comandantes.

La narrativa hasta ahora secreta de cómo Sánchez y Soto lograron engañar a sus superiores y tramar una revuelta contra Maduro refleja el grado de descontento y temor entre las fuerzas armadas venezolanas, en momentos en que el gobernante venezolano se aferra al poder pese a duras sanciones económicas estadounidenses impuestas a raíz de elecciones que Maduro dice haber ganado pero que son ampliamente consideradas fraudulentas.

Los dos oficiales parecían ser los apropiados para un operativo tan riesgoso. Habían ascendido entre las filas hasta llegar a posiciones de comando, ganándose la confianza de los comandantes y teniendo un control directo sobre soldados.

Un grupo de desertores militares venezolanos desconocieron desde Perú a Nicolás Maduro como su comandante en jefe. Al tiempo que hicieron un llamado a todos los componentes de la fuerza armada en Venezuela a que no continúen siendo sometidos y utilizados. Los militares reconocieron a Juan Guaidó, como presidente interino de Venezuela.

Sánchez, de 41 años, fue comandante de una guarnición de unos 500 guardias nacionales responsables de proteger dependencias públicas en Caracas, inclusive el palacio presidencial Miraflores y la sede del Tribunal Supremo. Soto, de 43, estuvo por un tiempo asignado a la policía política SEBIN, comandando un equipo de 150 agentes con órdenes de espiar contra opositores.

Los dos militares, amigos desde hace años, cuentan que con los años se sentían más y más frustrados por el colapso de la economía venezolana y empezaron a tramar en secreto un intento de derrocar a Maduro. Eventualmente establecieron contacto con la oposición, incluso con el presidente de la Asamblea Nacional Juan Guaidó, quien es considerado el presidente legítimo de Venezuela por muchos venezolanos, además de Estados Unidos y otros 60 países.

El 30 de abril, asombraron a Venezuela al aparecer con tanques y efectivos fuertemente armados en un puente en el este de Caracas al lado de Guaidó y el activista Leopoldo López, a quienes liberaron de un arresto domiciliario que consideraban ilegítimo.

El gobierno no confirma su muerte.

“Cuando fui hablar con mi tropa a las 2 a.m. y les dije que íbamos a liberar a Venezuela algunos quebraron en llanto. No lo podían creer pero estaban comprometidos desde el primer momento", recuerda Sánchez, quien como parte de su responsabilidad como guardia en la Asamblea Nacional con frecuencia tenía que comunicarse con legisladores de la oposición.

Agrega Soto: "Estaba la mesa servida para que el país tuviera una transición pacífica".

Sin embargo, se sienten defraudados por allegados de Maduro, entre ellos el presidente del Tribunal Supremo Maikel Moreno y el ministro de defensa Vladimir Padrino, quien según dicen incumplieron su promesa de abandonar a Maduro. Tanto Moreno como Padrino han reiterado su lealtad a Maduro.

Oscar Pérez, el piloto que atacó al Tribunal Supremo en Venezuela se comunicó con el general Antonio Rivero.

En la confusión que siguió a la fallida rebelión, los militares buscaron protección en la parte trasera de motocicletas, sacándose sus uniformes y tocando las puertas, inicialmente sin respuesta, de varias embajadas.

En medio del caos, López llamó al presidente panameño Juan Carlos Varela, quien inmediatamente se puso a su lado y garantizó su entrada a la embajada.

En una entrevista, Varela recordó cómo dos meses antes de la invasión estadounidense a Panamá en 1989, el entonces dictador general Manuel Noriega aplastó una rebelión similar y ordenó la ejecución de más de 10 rebeldes.

La embajada, en un alto edificio de oficinas ocupado por empresas estatales y contratistas del gobierno, se convirtió en su hogar los siguientes siete meses. Ambos militares venezolanos agradecieron al personal de la embajada y al pueblo panameño.

Estando en la embajada, los 16 militares se esforzaron por mantener la disciplina militar. A fin de no molestar al personal diplomático, decidieron dormir de día, en delgados colchones en una pequeña habitación. Y de noche, cuando los empleados se iban a sus casas, cocinaban con una pequeña hornilla, hacían ejercicios con pesas improvisadas a partir de botellones de agua y leían textos religiosos en círculo.

Exit mobile version