Después de que su esposo falleciera de cáncer, una anciana de la Florida decidió cumplir los deseos de él: que continuara viajando en cruceros por todo el mundo.
Lee Watchtstetter, de 86 años, vendió su casa en Fort Lauderdale y con ese dinero se mudó a un camarote en un crucero de lujo, por el que paga $164,000 al año.
Durante los 50 años que duró su matrimonio, ambos viajaron con frecuencia en cruceros.
Lee Watchtstetter vivió primero en Holland America y ahora se mudó a otro crucero, el Crystal Serenity, donde reside desde hacer casi 7 años.
Ciertamente, para esta señora, en el mar la vida es más sabrosa.