Tras las pérdidas de la jornada anterior, Wall Street rebotó este jueves apoyada en la subida del precio del petróleo y los probables nuevos estímulos económicos adelantados por el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi.
Los inversores se movieron un día más al ritmo dictado por el mercado petrolero, que recuperó a lo largo del día parte del derrumbe que había experimentado el miércoles.
El barril de Texas, de referencia en Estados Unidos, subió un 4,16 % y volvió a acercarse a la barrera de los 30 dólares, tras haber llegado a perder los 27 y haber caído a su nivel más bajo desde 2003.
Según algunos analistas, el alza podría señalar el comienzo de la estabilización en un mercado que se ha visto sacudido por el exceso de oferta en los últimos meses.
Otros, sin embargo, consideran que la subida es simplemente un movimiento puntual tras el desplome de ayer y siguen vaticinando una tendencia a la baja, sobre todo ante el incremento de la producción que provocará el levantamiento de sanciones a Irán.
La subida del precio del crudo, por el momento, sirvió para que hoy el sector energético liderara Wall Street con un alza del 3,20 % y para calmar un poco los ánimos en el parqué.
El Dow Jones terminó el día con un avance del 0,74 %, mientras que el selectivo S&P 500 progresó un 0,52 % y el índice compuesto del mercado Nasdaq avanzó un leve 0,01 % hasta 4.472,06 unidades.
Al optimismo ayudó además el mensaje ofrecido este jueves por Draghi, que con un lenguaje sorprendentemente claro vino a adelantar que el BCE aplicará más estímulos monetarios en su reunión de marzo.
Sus palabras provocaron fuertes subidas en Europa y alzas algo más moderadas en EE.UU., donde los expertos siguen viendo con preocupación el lento crecimiento en el viejo continente, sobre todo en un momento de ralentización en otras potencias como China.
