Al menos cuatro o cinco trabajadores de un laboratorio de investigación al norte de Tokyo, resultaron expuestos a radiación interna el martes.
Aparentemente la entidad encargada de las regulaciones sobre radiación nuclear en Japón, no verificó el contenedor de combustible que se había roto una vez en 26 años.
Uno de los trabajadores recibió el peor nivel de exposición de plutonio en la historia de Japón.
El combustible nuclear fue colocado en un contenedor de polietileno, que a su vez estaba cubierto con dos bolsas de vinilo. Luego el combustible fue puesto en un recipiente de acero inoxidable por seguridad.
Segun las autoridades, los trabajadores quitaron la tapa para realizar una inspección, las bolsas de vinilo se rompieron, y el polvo del combustible se esparció por el aire.
Esta situación sacó a la luz pública que la agencia de energía atómica japonesa no había verificado el contenedor desde 1991.
La agencia aparentemente tampocó asumió la posibilidad de daños al vinilo.
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Las máscaras de seguridad de los trabajadores solamente tapaban la parte inferior de sus rostros, y éstos tampoco utilizaban prendas herméticas para manejar adecuadamente los materiales.
