CIUDAD DE MÉXICO - El timbre del teléfono suena y detrás de la bocina se escucha la voz y el llanto de una mujer.
"Sí, no se preocupe. En este momento yo puedo ayudarle", dice el operador que trata de calmarla mientras llega la ayuda.
"Entiendo por lo que está pasando, entiendo que la acaba de golpear su esposo".
La escena se repite una y otra vez en los Centros de Apoyo Telefónico de México, en donde cada día reciben por lo menos 3,500 llamadas de auxilio por incidentes,, como violaciones, acoso, abuso, agresiones verbales y físicas en contra de mujeres.
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"Dentro del flujo de esas llamadas, muchísimas, también hay que tomar en cuenta que son de alto riesgo. ¿Cómo de alto riesgo?, básicamente que cuando las personas nos hablan tienen la situación al momento, acaban de ser golpeadas, violentadas", dice Víctor Zaragoza, supervisor del Centro de Contacto.
Los 146 reportes a nivel nacional que se registran cada hora son muestra de la situación que ellas viven en esta nación y por la cual este día, miles tomaron las calles para exigir que se erradique este delito.
"Somos muchas las mujeres, una de cada tres ha sufrido algún tipo de violencia eso es muchísimo", dice una de las que participó en la marcha.
México
En las protestas algunas convirtieron su demandas en desmanes, pintas y agresiones.
Otras, se unieron a la protesta desde sus casas , trabajos y escuelas.
Aquí, en Ciudad Universitaria, al igual que en otros puntos de la república colocaron tendederos para recordar a las víctimas, pero sobre todo para exigir que escuchen sus voces y se haga justicia.
"Levanta la voz por tu hija, por tu prima, por tu hermana, por todas".
En respuesta, el mandatario mexicano indicó que no está ajeno al problema.
"Seguiremos protegiendo a las mujeres por convicción no por moda", dijo este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Pero ellas siguieron marchando, seguras de que mientras lo hacían seguía creciendo el número de víctimas.