Las minifaldas, escotes, pantalones ceñidos al cuerpo y todo tipo de vestimenta "inmoral" será un impedimento para asistir a la Catedral de Toluca y a todos los templos de esa diócesis en el central Estado de México.
Al menos, así lo indican cientos de cartelones dirigidos a la "mujer católica", según las instrucciones dadas por el obispo de Toluca, Francisco Javier Chavolla Ramos.
Según la visión del jerarca católico en esa región, localizada a 40.39 millas (unos 65 kilómetros) de la Ciudad de México, ese tipo de prendas de vestir ofenden a Dios.
El mensaje impreso en los carteles recuerdan a las mujeres que los templos son sitios para la oración y, por tal motivo, ellas deben acudir con vestimenta moral.
La disposición del obispo Chavolla Ramos, uno de los más férreos opositores a los matrimonios igualitarios, ha causado polémica y oposición.
El rector de la Universidad Autónoma del Estado de México, Jorge Olvera García, llamó a las comisiones de derechos humanos tanto nacional como estatal a que estén atentos a evitar que se violente la dignidad de las personas, especialmente las mujeres.
La medida, aseguró Olvera García, es retrógrada y de siglos pasados, ya que en estos momentos debe prevalecer la igualdad.
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Esta no es la primera ocasión en que representantes de la Iglesia Católica buscan prohibir el uso de cierto tipo de vestimenta, como ocurrió en 2014 en el central estado de Aguascalientes.
