Una familia de Coral Gables vivió una pesadilla luego de que una estudiante de la Universidad Estatal de la Florida quedó atrapada en un aula cuando un tirador entró al campus disparando en un incidente que dejó dos personas muertas y varias heridas.
Valentina Gutiérrez quedó atrapada en medio del pánico por un tiroteo. Mientras se resguardaba, su madre en Miami solo podía rezar y aferrarse a los mensajes de texto que confirmaban que su hija seguía viva.
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“Tengo miedo”, se le oye decir a Valentina Gutiérrez, estudiante de primer año de FSU, quien desde el salón de clases donde se encontraba intentando proteger su vida hablaba con su madre.
Gutiérrez relataba en medio de los minutos de tensión: “Estamos escondidos. Dicen que los disparos fueron en otro edificio, pero nadie sabe con certeza qué está pasando.”
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Un momento ante, Valentina escribía desesperada a su madre, Laura García, quien desde Miami no imaginaba el horror que experimentaba su hija, recuerda que durante los primeros minutos al teléfono no se creía lo que estaba pasando.
Valentina cuenta que escuchó los disparos, y que una profesora le indicó por donde correr. Pasaron casi 50 minutos encerrados, hasta que llegaron los agentes y evacuaron el edificio.
Laura, la madre de Valentina, dice desde Miami que vivió cada segundo como si estuviera ahí. Solo pudo respirar cuando escuchó la voz de su hija tras salir con vida. “Es una experiencia que ninguna madre debería vivir… pero gracias a Dios, está bien.”