Lleno de "valientes" que apuestan por su desarrollo personal y profesional está repleto "Pilos", una taquería de Miami cuyos trabajadores son personas con necesidades especiales que encuentran en este sitio algo más que una gran familia.
El restaurante atrae por la singularidad de sus trabajadores y por un menú que deleita al paladar más exigente, confiesa su dueño Derek González.
El joven de origen mexicano se inspiró para fundar el lugar en una tía muy querida que era Síndrome de Down y quien ha quedado inmortalizada en una pintura que cuelga de una pared del restaurante.
Estos jóvenes con necesidades especiales se sienten independientes y útiles, y muestran a la ciudad que nuevos negocios con ellos de mano obra es posible si el empeño radica en todos.
