El tumulto se apoderó de los pasillos del renombrado centro comercial Sawgrass Mills cuando se desató un violento incidente en una de sus tiendas. Dos individuos irrumpieron en el establecimiento, ocultando sus identidades tras el velo de una máscara, y desataron el caos al destrozar un estante de cristal.
Según testimonios recabados en el lugar, Paul, un empleado del centro comercial, relató la escena con estupor: "Se robaron las carteras más caras y luego sacaron un gas pimienta, alcanzando a una persona en los ojos". Los efectos del gas pimienta se extendieron, dejando a dos personas, incluida una empleada del departamento de bolsas de marca, sufriendo sus consecuencias.
Yuly, otra trabajadora del centro comercial, describió el momento como aterrador: "Ella vino para acá, pero estaba afectada... muy asustada, definitivamente".
Los delincuentes, tras apoderarse de la mercancía, emprendieron la huida a toda prisa, cargando con lo que pudieron y escapando en una camioneta blanca cuyo destino aún se desconoce.
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La tienda, ante este incidente, tomó la decisión de cerrar sus puertas horas más tarde, mientras las autoridades llevan a cabo una investigación exhaustiva sobre lo sucedido.
Sandy Díaz, una cliente consternada por lo ocurrido, expresó su preocupación: "Por ahora, la policía no ha compartido una descripción de los sospechosos", aunque pudo distinguir que eran "dos jovencitos".
Los empleados del Sawgrass Mills revelaron que este no es el primer incidente de este tipo, lo que genera inquietud entre la comunidad. "Da pena porque son tiendas grandes que están perdiendo su mercancía... y da miedo de que a uno pueda pasarle algo aquí", lamentó uno de los entrevistados.
