Hialeah se convirtió en la segunda ciudad del condado de Miami-Dade en entrar a un acuerdo con la administración Trump para que agentes de la policía ayuden al Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés). La primera ciudad en hacer lo mismo fue Coral Gables.
Hialeah votó para entrar en el acuerdo de forma unánime. Y un día después algunos residentes y empresarios se preocupan sobre el impacto que tendrá este convenio entre las fuerzas de orden locales y federales.
Noticias de Florida 24/7 en Telemundo 51.

El alcalde y el jefe de la policía de Hialeah dicen que no va a cambiar mucho en cuanto el trabajo de las autoridades aunque el acuerdo le da a los agentes poderes mucho más amplios en cuanto a la inmigración.
La gran mayoría de los residentes de la ciudad son hispanos, muchos recién llegados, la mayoría teme por lo que podría pasar de ahora en lo adelante.
Manténte al tanto de las noticias locales y del estado del tiempo. Suscríbete a nuestros newsletters gratuitos aquí.

Esteban Bovo, el alcalde de Hialeah, dice que la población en general no debe preocuparse. "El que está viviendo ilegal en este país sabemos que las condiciones que ellos no son las mejores. Realmente les aconsejo que ningún tipo de ley en la policía de Hialeah va a seguir sirviendo esta comunidad como siempre lo ha hecho".
La ley en que se basa el acuerdo indica que nadie puede ser detenido por no tener estatus legal al ser víctima o testigo de un crimen.
El acuerdo le da a los departamentos de policía varios poderes que incluyen: El poder y la autoridad para interrogar a cualquier extranjero en cuanto a su derecho a estar o permanecer en los Estados Unidos. Y para procesar por violación de las leyes de inmigración a las personas que han sido detenidas por delitos estatales o federales, según indica ICE.
Local
George Fuentes, jefe de la policía de Hialeah, dice que "los oficiales van a estar afuera preguntando por los papeles de inmigración. Eso no es lo que los oficiales van a estar haciendo. Van a seguir asegurando el bienestar de nuestra comunidad".
Mientras activistas se preocupan por los que están a punto de perder su estatus de protección temporal.
Millie Herrera, activista pro inmigrante, precisa que "el gobierno federal lo que ha hecho es que ha convertido a personas estaban legales en este país en personas indocumentadas quitándoles la protección y quitándoles el parole humanitario".
El acuerdo tambien permite que la policía detenga a quienes intenten entrar o ya se encuentren ilegalmente en Estados Unidos, y les permite arrestar a personas sin orden judicial y ejecutar órdenes de detención de inmigrantes.
John de la Vega, abogado de Inmigración, remarca que "muchas personas están preocupadas, pero esto no afecta a todos los inmigrantes. Por ejemplo, quienes tienen parole o un I-220A no deberían tener problemas porque no están bajo orden de deportación.”
El abogado hace un llamado a la comunidad indocumentada para que conozcan sus derechos y tomen precauciones. "Es fundamental que las personas sin estatus legal en el país sepan cómo actuar en caso de un encuentro con las autoridades. Además, si no tienen una licencia de conducir válida, lo recomendable es que eviten manejar."
Mientras algunos residentes apoyan la resolución, otros temen que esto genere más redadas y afecte a familias trabajadoras. "Hialeah es una ciudad de inmigrantes. Esto solo va a traer más miedo y problemas para nuestra gente."