El sábado pasado en un tranquilo vecindario en Royal Palm Beach un oso negro de aproximadamente 300 libras deambulaba por los patios traseros cuando la policía se hizo presente y aseguran que la Comisión de Vida Salvaje de Florida también fue llamada.
Las autoridades trataron de mantener al oso en un árbol pero desafortunadamente cuando bajó se vieron en la necesidad de neutralizarlo por seguridad de la comunidad.
Vecinos con los que hablé lamentan que todo esto haya terminado con la muerte del oso negro, justo detrás de una casa y aseguran que si bien es raro que aparezca un oso no es imposible ya que están cerca de Loxahatchee.
“Es muy raro saber que un oso negro estuvo aquí, eso no es usual. Pero pienso que se pudo haber manejado de otra manera lo pudieron haber disparado con un dardo tranquilizante”, dice Zona Case, una vecina del lugar del incidente.
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“Estamos en la Florida donde hay muchos animales salvajes alrededor deberían estar preparados con pistolas de dardos tranquilizantes a todo momento”, advierte otro vecino, Derrick Case.
Según la Comisión de Vida Salvaje de Florida, la población del oso negro entre 2014 y 2015 en el sur de la Florida, era un poco más de 1000 osos, un crecimiento del 49% con respecto al año 2002.
El domingo pasado otro oso negro fue visto deambulando por un vecindario en Naples.
Local
Amy Kight de Busch Wildlife Sanctuary explica que si “ves la cantidad de gente que se está mudando a la Florida y obviamente eso desplaza a la vida salvaje. Ellos siempre están buscando nuevos espacios los osos toman un territorio y en verdad no quieren que hayan otros osos".
“ Me duele tanto que ya ese oso no esté, tenía que 300 libras seis pies de altura, era un oso maduro y lo hemos perdido ahora”, dice una pareja que lamenta el desenlace de esta situación.
La oficina del alguacil del condado señaló que le dispararon al oso ya que no pensaban que podía deambular libremente, también les preocupaba que entrara en otros vecindarios o incluso a las calles con tráfico mientras tanto la Comisión de Vida Salvaje de la Florida continúa investigando este caso.
