Amanece tras las rejas este lunes el conductor de un Maserati robado, que protagonizó una persecución policial por los condados de Broward y Miami-Dade, en el sur de Florida.
La fuga dejó un agente de la policía de Miami-Dade herido. El conductor, identificado como Devonta Keon, de 32 años, y un pasajero de 30 años, enfrentan a cargos por hurto en mayor cuantía y por eludir a las fuerzas del orden.
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Los oficiales de la Patrulla de Carretera de Florida (FHP) dijeron que la persecución comenzó en el condado de Broward poco después de las 9:30 a.m., cuando los policías vieron el Maserati gris robado a lo largo de la I-95 cerca de la calle Sheridan e intentaron detenerse antes de que huyera y entrara en el condado de Miami-Dade.
Los oficiales de la policía de Miami-Dade (MDPD) asistieron y el automóvil robado salió de la I-95 y chocó contra una patrulla de MDPD cerca de la intersección de NW avenida 27 y la calle 195 antes de viajar hacia el norte por la autopista Turnpike.
El oficial que estaba en la patrulla resultó herido y fue trasladado a un hospital de la zona. Los funcionarios no han revelado la identidad del oficial, pero dijeron que el oficial se encuentra en condición estable.
Más tarde, el automóvil viajaría de regreso a Broward y se estrelló al sur de Griffin Road. La policía detuvo a Devonta Keon, de 32 años, a James Dasher, de 30, y a una tercera persona y los trasladó al Memorial Regional Hospital con lesiones que no amenazaban la vida.