Luis Antonio Martínez, un padre cubano, lleva menos de un año en Estados Unidos y se encuentra desesperado pidiendo una visa humanitaria para regresar a Cuba a ver a su hijo.
El menor tiene 7 años, y desde el jueves pasado permanece en condición crítica, en el hospital Juan Manuel Márquez de La Habana.
“Es posible que tenga una muerte cerebral, él está crítico”, dice Martínez entre lágrimas.
Cada minuto qué pasa es agonizante para Luis Antonio, padre de Anthony, un niño de 7 años que hace poco menos de una semana fue diagnosticado con hemorragia cerebral masiva.
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Yuleidy Fábregas, la hermana, dice: “tuvo un vómito y se desmayó y empezó una hemorragia cerebral. Lo operaron y salió de la cirugía, pero la hemorragia cerebral fue en el cerebelo y es un lugar muy complicado”.
Luis apenas puede hablar, se apoya en su hermana y juntos piden ayuda para obtener un permiso de entrada a la isla.
“Que me dejen entrar y que me dejen regresar a este país”, dice Martínez.
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“La situación migratoria de mi hermano es difícil, pero, por favor, déjenlo ir a Cuba”, dice Fábregas.
Joana soler, abogada, asegura que “no tiene pasaporte, el pasaporte a él se lo quitaron en la frontera”.
Con apenas 11 meses en Estados Unidos, Luis acudió a la oficina del abogado de inmigración Willy Allen, buscando asesoría legal en su caso.
“Lo que hicimos fue comunicarnos con las autoridades cubanas, las cuales están dispuestas a hacer un documento para autorizar que él salga de los Estados Unidos y entre a Cuba”, dice Soler.
“Yo sé que estando al lado de él lo voy a ayudar mucho”.
“Cuando esté en Cuba para regresar a EEUU, tendría que sacar su pasaporte cubano y nosotros nos encargaríamos de hacer un permiso de reentrada para autorizar el gobierno americano la entrada de este señor acá a los EEUU, por una razón humanitaria de muchísimo peso”, dice la abogada.
De la mano, aferrados al amor familiar, Luis y su hermana no pierden las esperanzas de que un milagro pueda devolverle a Anthony la salud para recuperar su vida.
“Si me tengo que arrodillar me arrodillo, dejen que mi hermano vaya a Cuba, por favor, para que vea a su hijo y le sostenga la mano”, dice Fábregas.
