Los arrestos de los oficiales Karl Kirkland y José Gutiérrez fueron el fruto de una investigación realizada a agentes de centros correccionales que presuntamente ayudaban a reclusos a suministrarles cosas de contrabando en la cárcel, según confirmaron las autoridades.
La investigación encontró que un preso utilizó una cuenta de otro reo para llamar sobre un pedido de comida para un policía en el mes de marzo.
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Los investigadores fueron notificados de que ese mismo reo usó el teléfono de otro preso para llamar a una mujer y así coordinar un encuentro entre ella y Kirkland para que la ayudara a envolver los regalos.
Según el reporte policial él y la mujer acordaron encontrarse el pasado lunes en el estacionamiento de un McDonalds. Detectives encubiertos vieron a Kirkland llegar al restaurante de comida rápida en donde una mujer se bajó de su carro y le entregó al policía una bolsa marrón.
Los investigadores siguieron al oficial hasta una estación de gasolina cerca de la cárcel y encontraron en la basura la bolsa que contenía correspondencia cigarrillos y una bolsa plástica con 31 gramos de metanfetaminas.
Kirkland fue puesto bajo custodia cuando llegó a trabajar. Otro reporte policial señala que Gutiérrez presuntamente recibió comida en la cárcel, dentro de la caja de pizza encontraron dos bolsas plásticas con marihuana.
Las autoridades emitieron el siguiente comunicado: “La Oficina del Alguacil del Condado Palm Beach le exige a sus empleados los estándares más altos, y nunca olvida su tarea de mantener la confianza del público. Desafortunadamente, a veces un empleado toma una mala decisión la cual conlleva a una conducta equivocada”.
Local
Kirkland enfrenta cargos de ingreso de contrabando y tráfico de metanfetaminas mientras Gutiérrez enfrenta cargos de conspiración para introducir contrabando a un centro de detención y posesión de marihuana
El juez se le impuso a Kirkland una fianza de 165 mil dólares mientras Gutierrez enfrenta una de 11 mil dólares. Ambos oficiales fueron dados de baja administrativa.
