MIAMI, Florida - Negocios como los de Opa-locka se han visto gravemente afectados por las recientes lluvias. El agua acumulada de las precipitaciones de ayer todavía no ha cedido, y ya hay más lluvias pronosticadas.
Las autoridades aseguran estar haciendo todo lo posible para aliviar la situación. Ante la inminente posibilidad de más inundaciones, el condado Miami-Dade permanece en estado de emergencia por inundaciones repentinas. La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, declaró: “Los departamentos del condado de Miami-Dade han estado tomando medidas para preparar nuestra infraestructura y ayudar a reducir las inundaciones en los puntos críticos”.
En el restaurante Romo’s Place, los efectos de las lluvias se sienten de manera notable. A pesar de tener clientes, el establecimiento prácticamente funcionaba a la mitad de su capacidad. Eloy Romo, propietario del restaurante, comentó: “Por la mañana no pudimos hacer nada en el desayuno. Gracias a la compañía que vino y nos sacó un poco de agua de adentro, pudimos recuperar algo del almuerzo”. El local, situado en el 13300 del noroeste de la avenida 42 en Opa-locka, sufrió daños en la alfombra y varios muebles se mojaron. Romo expresó: “Eso son cosas que se pueden recuperar, lo que hace falta es que no siga pasando continuamente”.
Este jueves, con una alerta de inundaciones vigente hasta la noche del viernes, la situación sigue siendo crítica. Francis Suárez, alcalde de Miami, comentó: “Estamos reenfocando nuestros recursos a base de lo que vimos ayer. Hay zonas, por ejemplo, en el norte, que se inundaron. Vamos a poner bombas temporarias ahí hasta que tengamos los recursos permanentes”.
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La distribución de bolsas de arena a comerciantes y residentes en ciudades como Miami ha tratado de mitigar la situación en alguna medida. Esta tarde, el condado de Miami-Dade activó el Centro de Operaciones de Emergencia en preparación para más lluvias. Esto permitirá la coordinación de recursos clave para mitigar el impacto en áreas vulnerables.
Mientras las autoridades trabajan para proteger a los residentes y negocios, la comunidad sigue enfrentando los desafíos que traen las intensas lluvias y las consecuentes inundaciones.
