Decenas de migrante esperan en México para cruzar a EEUU, mientras la policía local solo los dispersa pero no los detiene, sin embargo, a la otra orilla en suelo estadounidense se preparan para actuar en caso de un mayor flujo de migrantes.
"Yo nunca pensé que iba a ser tan duro, un viaje así. Los niños bajan de peso … no ha sido fácil", dijo una madre entre lágrimas, mientras cuenta lo sucedido en su trayecto para llegar hasta la frontera entre EEUU y México.
Un equipo de Telemundo 51 se unió a Ritchie quien conoce bien el área de cruce por la parte Mexicana. El hombre recibió la información de un punto específico donde iba a llegar un enorme grupo de personas dispuesto a cruzar.
Luego de manejar por unos 30 minutos, gran parte del trayecto por calles de lodo, vimos a supuestos informantes. Estábamos en una zona totalmente hostil, donde los coyotes tienen influencia y la presencia de la prensa no era de su agrado, por lo que tuvimos que abandonar el lugar.
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Estando en la supuesta zona de cruce se escucharon voces de personas que presuntamente estaban escondidas, pero una llamada al celular del contacto que ayudaba a nuestro equipo les alertó que debían abandonar de inmediato la zona por su seguridad.
Tras cruzar con éxito a Estados Unidos el impacto de la realidad del paso de los migrantes por Eagle Pass se hizo de nuevo latente, y llegó el encuentro con una camioneta de los migrantes que iban a cruzar por Piedras Negras, que ahora serán procesados y les darán sus destinos finales.