MIAMI.- Hoy martes todo parece estar tranquilo en la guardería Lincoln-Marti en Homestead, que se estremeció este lunes por una tragedia, luego de que, según la policía, un bebé de 10 meses que asistía a falleció este lunes.
Todo habría ocurrido cerca de la 1 de la tarde, según información preliminar de las autoridades. Un trabajador de la guardería, ubicada en la avenida Krome, estaba haciendo rondas y notó que el niño no respiraba.
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Allí fue cuando llamaron al 911 y el niño fue transportado por helicóptero al hospital Florida Kendall. Desafortunadamente, el niño fue declarado muerto en el centro médico poco después. La causa de la muerte está bajo investigación.
Sean Tomlin dice estar destrozado y confundido por la muerte de su nieto. Cuenta que lo habían dejado en el centro de cuidado para niños la mañana del lunes.
“Mi hijo me llamó diciendo que su bebé no estaba respirando”, cuenta el abuelo.
“Estaba jugando con él esta mañana, mientras mi hijo lo estaba alistando para la escuela”, dice el abuelo.
La emergencia tambien provocó que todos los padres vinieran muy rápido por sus hijos, aunque algunos aliviados por ver a sus pequeños bien, no podían ocultar el dolor al escuchar la triste noticia.
Local
Maria Gálvez, quien tiene una niña en la guardería, dijo: “Me llamaron que viniera de emergencia, y cuando yo vine aquí pensé que era algo que había pasado”.
“Yo sentía morirme, y no sabia lo que había pasado, pobre su madre, sus padres hay qué triste”, dijo Gálvez.
Supuestamente el único espacio donde no había un sistema de vigilancia en todo el centro era donde encontraron al bebé.
Los detectives tambien le dijeron al abuelo del pequeño que mañana quizá habrá más claridad sobre su muerte, cuando le hagan la autopsia a Tayvon.
