Ante el alarmante aumento del uso de dispositivos de vapeo entre estudiantes, el distrito escolar del condado de Palm Beach ha lanzado un innovador programa piloto. Tres escuelas han instalado detectores de vapeo en los baños, una medida que busca frenar esta práctica que, según el CDC, afecta a más de 1.5 millones de jóvenes en escuelas medias y secundarias en todo el país.
El uso de cigarrillos electrónicos, conocido como vapeo, se ha convertido en una tendencia preocupante en las aulas. En lo que va del año, las escuelas del condado han reportado más de 600 incidentes relacionados con estudiantes que vapean dentro de las instalaciones escolares.
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“Estamos tratando de enviar el mensaje a los estudiantes y a sus padres de que esto es realmente peligroso”, afirmó Mathew Lane, miembro de la Junta Escolar, en un llamado urgente para enfrentar esta problemática.
Los detectores, instalados estratégicamente en los baños de las tres escuelas seleccionadas, están diseñados para identificar partículas emitidas por los dispositivos de vapeo, así como humo de cigarrillos, THC y marihuana. Cuando el dispositivo detecta actividad, envía de inmediato una alerta al personal de la escuela, lo que permite tomar acción inmediata.
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Los estudiantes sorprendidos vapeando enfrentan sanciones serias: desde tres días de suspensión para alumnos de primaria hasta cinco días para aquellos en secundaria o preparatoria.
La implementación de estos dispositivos ha generado un respaldo mayoritario entre los padres de familia, quienes consideran que es una herramienta necesaria para combatir esta peligrosa tendencia.
Fabiola Medina, madre de uno de los estudiantes, aplaudió la medida:
“Me parece buenísimo porque la preocupación de todos los padres de familia es esa: no podemos controlarlo todo en casa, y si en la escuela no ayudan, la situación se vuelve cada día más grave”.Por su parte, Rebeca González, otra madre, destacó la importancia de actuar rápidamente: “Es muy bien porque en este momento necesitan parar eso. Están en la adolescencia, tienen mucha vida por delante”.
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Incluso padres como el señor Ortiz subrayaron la dimensión educativa de la medida:
“Está excelente porque no podemos permitir que los jóvenes se pierdan. Hay que darles educación sana y no permitir que estén fumando o texteando en el baño”.
Estudios recientes advierten que el uso de cigarrillos electrónicos puede causar daño pulmonar, adicción a la nicotina y, en algunos casos, abrir las puertas al consumo de sustancias más fuertes.