En una de las primeras llamadas que se recibió a través del 911, una mujer alertaba que alguien disparaba en el gimnasio Equinox de Coral Gables.
Le decía a la operadora “no sé lo que está pasando”, mientras las imágenes dadas a conocer hoy, que mostraban el terror, el pánico y la desesperación eran captadas por las cámaras de seguridad del gimnasio y del centro comercial Merrick Park.
La gente corría para protegerse de los disparos y hasta una de las cámaras grabó a familias enteras, y padres con niños en sus brazos, huyendo por los pasillos y por el estacionamiento de varios pisos.
Según la investigación, aquella fatídica tarde del 8 de abril del año pasado el pistolero, Abeku Wilson de 33 años, regresó al gimnasio armado después de haber sido despedido. Le disparó mortalmente a dos de los gerentes, Janine Ackerman, de 35 años y Marios Hortis, de 42. Decenas de policías respondían de inmediato después de esas llamadas al 911. Trataron de dar con el pistolero, pero finalmente Abeku Wilson se quitó la vida.
Entre las llamadas dadas a conocer están las de testigos, y familiares desesperados que sabían que sus allegados estaban allí.
