La familia de la joven de 17 años que murió baleada frente a un bar en Kendall hizo este viernes un llamado a la comunidad para recolectar información que permita dar con el responsable de su asesinato.
Gabriela Aldana falleció la semana pasada tras recibir un disparo en la cabeza cuando estaba en el estacionamiento frente a Hookah Palace, lugar al que había ido esa noche con varios amigos.
Susana Martínez, madre de la víctima, dijo en una rueda de prensa que le había dado permiso a su hija esa noche para salir con sus amigos. Gabriela era su única hija.
"A mí me tocó perder a mi hija pero pudo haber sido otro muchacho. Mi hija era muy valiente, quería a todo el mundo, a todos sus amiguitos. Si alguno vio algo por favor qué información", dijo la madre visiblemente afectada.
Aunque no hay mayor información sobre el presunto responsable, los detectives informaron que la joven de solo 17 años no era el blanco de los disparos. En el momento del tiroteo había entre 30-40 personas en el estacionamiento, según las autoridades.
El asesino de la joven habría huido de la escena en un Mercedez Benz negro de cuatro puertas.
Amigos de la joven abrieron una cuenta de GoFundMe para recolectar dinero para cubrir los gastos de su funeral.
"Gabi que no tenía nada que ver y recibió una bala perdida por culpa de alguien ya no está con nosotros y su mami se quedó sola sin su niña amada mientras el asesino está en la calle sin pagar por el daño tan cruel que hizo", dice la campaña.
