El gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció este sábado que solicitará una declaración de desastre mayor para el condado de Broward, una acción que muchos venían esperando desde hace casi dos semanas.
Esta es una solicitud al gobierno federal que brindaría recursos para personas afectadas e infraestructura en zonas como el barrio Edgewood, en Fort Lauderdale. Lo que queda para muchas de estas familias es devastación, pérdidas, basura.
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El administrador de la ciudad de Fort Lauderdale, Greg Chavarría, precisa: “estamos esperando esa respuesta y cuando tengamos esa respuesta vamos a poder solicitar ayuda individual para las personas que han sido afectadas”.
Si esta declaración es otorgada por la Casa Blanca, brindaría una amplia gama de recursos de asistencia federal para personas e infraestructura pública afectadas directamente por el paso de este sistema de lluvias.
Una de estas personas afectadas por las inundaciones en Fort Lauderdale es la señora Octavia Angelina Morales, quien tiene días intentando rescatar pertenencias, pues dice que lo perdió todo.
“Esto fue cosa que nunca había pasado … esta agua, una inundación terrible … los carros se dañaron fueron pérdidas total y no digamos lo material”, señala Morales, quien afuera de su casa tiene lo poco que pudo rescatar.
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“Hoy es lo último que saqué porque van a remodelar el apartamento porque la humedad subió más de 4 pies … eso se fue todo basura ajá”, dice mientras señala sus pertenencias en medio de la calle.
A solo calles de allí, un devastador panorama deja ver pilas de muebles, ropa, escombros. Todo destruido, casa por casa, donde se ve la muestra de lo que provocaron las fuertes inundaciones en Fort Lauderdale el pasado 12 de abril.
“El agua llegaba hasta aquí -señala a mediados de la pared- nos quedamos sin luz 4, 5 días”, recuerda Octavia Angelina Morales, damnificada por las inundaciones de Fort Lauderdale.
Mientras tanto María Egues, quien también fue afectada por las inundaciones, acota: “subió como hasta aquí … al borde del rodapies pero en los bordes sí se me inundó un poco más … perdí todos los muebles”.
Una situación que viven los que fueron damnificados por las catastróficas lluvias en diferentes localidades de Broward.
“Difícil primera vez … tengo 23 años aquí y es primera vez que yo veo la lluvia bien fuerte y estamos luchando para salir adelante", apunta Egues.
Según registros de la la División de Manejo de Emergencias suman más de 1000 viviendas las que tienen daños importantes, adentro de muchas queda la humedad que al pasar de los días trae más incertidumbre en la comunidad.
“Nosotros estamos fritos … no tenemos ninguna ayuda … yo no tengo nada entonces estamos sufriendo todo eso”, remarca Octavia Angelina Morales, damnificada por las inundaciones de Fort Lauderdale.
Hace poco hablaba con un líder comunitario que también vive en una de esas estas casas, dice que ellos consideran este como la zona cero, pero que no ha sido tratados como tal. A dos semanas se sienten olvidados y piden la llegada de más asistencia de las autoridades.
