Al menos 20 locales comerciales del sur de la Florida recibieron el jueves amenazas de bomba a través de correos electrónicos y en lo que parece ser parte de una oleada nacional de extorsión cibernética.
En los correos electrónicos que han recibido decenas de compañías, escuelas y hospitales en distintas ciudades de Estados Unidos se les exige el pago de una extorsión mediante bitcoins.
Las amenazas parecen ser falsas, según las autoridades, y no se ha reportado el hallazgo de ningún explosivo en el país.
Un mensaje enviado a la empresa Natural Fruit, en Hialeah, exige el pago de $20,000 o amenaza con hacer estallar una supuesta bomba dentro del local comercial. La Policía de Hialeah se encuentra en el lugar investigando.
El centro psiquiátrico Citrus Health Network también recibió un mensaje similar en la tarde de este jueves. Los trabajadores y pacientes fueron evacuados del lugar.
"Nos alarmamos demasiado. En el estacionamiento nos dijeron que había una alarma de bomba y nos alarmamos más", dijo una mujer que se encontraba a esa hora en Citrus Health Network.
El FBI en Miami dijo en una comunicación que son “conscientes de las recientes amenazas de bomba en las ciudades de todo el país” y que están en contacto con “nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley para brindar asistencia".
Local
“Como siempre, alentamos al público a mantenerse alerta y a informar con prontitud sobre actividades sospechosas que podrían representar una amenaza para la seguridad pública”, agregó el FBI.
Por su parte, el Departamento de Policía de Palm Beach dijo estar “monitoreando las amenazas”.
“Actualmente estamos monitoreando múltiples amenazas de bomba que se han enviado electrónicamente a varios lugares en todo el condado. Estas amenazas también se están enviando a otras ubicaciones en todo el país y NO se consideran creíbles en este momento", indica una declaración de la Policía.
Al menos una docena de amenazas fueron enviadas a negocios en Fort Lauderdale y Pompano Beach. Al menos otras tres fueron reportadas en Orlando. También se han reportado amenazas en Nueva York, Chicago, Massachusetts, San Diego, Connecticut y Oklahoma City.