Por casi un mes, la familia de Hunt, la víctima, le suplicó al responsable que se entregara.
"Queremos que la persona que causó esta tragedia en nuestras vidas se presente, eso es todo", dijo en ese momento la abuela de Hunt.
Markay Hunt, de 21 años, murió después de que el coche en el que se desplazaba se estrellara de frente con un árbol.
El conductor había perdido el control cerca de la intersección de Rock Island Road con la calle primera del noroeste, en Margate.
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En el vehículo BMW, iban otras dos personas, una de ellas, la hija de Hunt de tan solo dos años de edad. Pero ella sobrevivió, como también sobrevivió la cuarta ocupante del automóvil, quien fue llevada a un hospital de la zona.
Quien manejaba, también sobrevivió pero huyó a pie antes de que llegara la policía.
Sumado al dolor por la pérdida, la familia durante 21 días lidió con la incertidumbre de no saber sobre el paradero del señalado culpable.
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Para el alivio de la familia de Hunt, quien iba ese día al volante ya fue capturado, se trata de Ricky Lavon Lee, de 22 años, quien este sábado temprano se presentó en corte.
Y aunque no tuvo que enfrentar cara a cara a los entristecidos familiares de Hunt pero si a la justicia.
El hombre ahora enfrenta 11 cargos y aunque su defensa pública intentó que el juez disminuyera la fianza, argumentando que el acusado no tiene como pagarla, el juez ni siquiera lo consideró.
Lavon Lee tendrá que pagar más de 250 mil dólares en fianza. Cuando la pague, si es que lo hace, tendrá casa por cárcel, portaría brazalete electrónico y no podrá volver a conducir.
