La confirmación de los primeros casos de dengue en Miami-Dade tiene en alerta a las autoridades sanitarias y a los residentes.
Lo primero que debe saber es que los síntomas de su contagio son fiebre, dolor de cabeza y de articulaciones.
Y para evitar la propagación de esta enfermedad, expertos recomiendan no tener botellas o recipientes donde se acumule el agua y mantener las piscinas en buenas condiciones con el cloro apropiado.
Así mismo, usar zapatos, medias, pantalones y camisas de mangas largas, especialmente para personas que trabajan en lugares donde hay mosquitos.
Aunque el dengue no es nuevo en el sur de la florida y cada año se detectan algunos casos aislados, lo que ha prendido las alarmas es que las dos personas que fueron recientemente diagnosticadas con dengue en el condado Miami-Dade no han viajado. Eso significa que el mosquito transmisor de la enfermedad está aquí.
El mismo mosquito que lleva el dengue, lleva el zika. Por eso la última vez que fue detectado en Miami-Dade fue durante el brote de zika de 2016.
El Departamento de Salud recomienda dos medidas preventivas principales para evitar la propagación del mosquito: La primera es reducir la cantidad de agua estancada dentro y alrededor de su vivienda. Y la segunda es limitar la cantidad de piel expuesta, quiere decir que si entras en contacto con el insecto, no podrá picarte.
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Otra forma de hacerlo es con repelentes.
Algo para tener en cuenta es que una persona que fue diagnosticada con dengue anteriormente necesita tener suma precaución. Hay cuatro tipos de esta enfermedad, y mientras más lo contraigas, más peligroso se vuelve.
