Gracias a la ayuda de la comunidad del sur de la Florida unos 30 nicaragüenses damnificados por el huracán Ida pudieron regresar a sus hogares.
Con palabras de gratitud varías familias nicaragüenses, incluidos unos 15 niños expresaron su aprecio a los buenos samaritanos que los apoyaron para que no quedaran desamparados, mientras esperaban en un hotel de Hollywood el paso del huracán Ida en New Orleans, donde están sus hogares.
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Edgardo Muñóz, padre de familia damnifícalo por huracán Ida, dice que está agradecido "especialmente a toda la gente que nos ayudó, ya estamos de regreso. En algunos lugares está viniendo la luz en la casa no, tenemos generadores para pasar energía no tenemos luz hay árboles caídos".
Y es que estas familias damnificadas tras el paso de esta potente tormenta, se habían quedado sin recursos económicos y no tenían dinero ni para regresar a sus casas
Carlos de la Rosa, un buen Samaritano, dice: "fue fuerte viendo niños tan chiquitos hasta de 8 meses nos sentimos bien que pudimos ayudar, pasar la noche algo de comer para los niños y tratarlos de ponerlo de regreso a casa".
Willie Castillo, fundador red social así somos Nicaragua, dice: "lo primero que pensé fue en ayudar. Contacté a las personas directamente en mensajes y eso fue lo que hice. Me sentí satisfecho, que no fue mucho, pero le dimos un plato de comida".
Cada muestra de amor y solidaridad brindó alivio, sació el hambre y le esperanzas a estas familias que deben ahora reconstruir sus hogares de cero.
