Este jueves en la noche fue el cierre de campaña presidencial en Argentina, con acusaciones de los candidatos y promesas que sólo el tiempo dirá si podrán ser cumplidas.
También hubo incidentes en una de las provincias, donde los peronistas se enfrentaron entre sí.
Estos son hechos que se repiten en actos donde el peronismo tiene presencia. En la provincia de Tucumán, la cuna de la independencia argentina, hubo varios heridos. Hasta el momento se sabe que una mujer sufrió golpes y se desmayó durante los empujones y un niño también fue afectado.
Vuelve a suceder: pobres contra pobres, mientras esto pasaba en algún rincón del país, los candidatos intentaban convencer al electorado.
Son 16 millones de personas están en lo que aquí se denomina por debajo de la línea de pobreza. Pero no son los únicos que sufren la crisis, la que también impacta en la clase media que ve como única salida irse del país.
Casi un tercio de la población argentina se concentra en la ciudad de Buenos Aires y en los condados, o partidos, como le dicen aquí, que la rodean. Y ahí conviven todas las clases sociales.
Para 2009, cuando Cristina Fernández promediaba su primer gobierno, como sucesora de su esposo, la clase media, que siempre fue un gran motor para el desarrollo del país, se había duplicado en una década.
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Pero desde que terminó su segundo mandato hasta este momento, con Mauricio Macri en la presidencia, ese segmento social volvió a caer.
En los últimos meses, en las calles de Buenos Aires, se vuelve a ver este panorama: personas sin hogar. No son solo los desamparados de siempre, sino también aquellos que ya no pudieron pagar sus hipotecas o rentas.
Los argentinos no confían en su moneda y ahorran en dólares para protegerse de la inflación. En la década del 90, un dólar era igual a un peso, y ahora por cada dólar hay que pagar 60 pesos. Eso impacta en el precio de la comida y en los servicios, por ende, golpea directo el bolsillo de esta sociedad.
