En recientes declaraciones el Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba culpa al gobierno de Estados Unidos de apostar "por un estallido social y eso ha sido provocado por el embargo, al crear sufrimiento desesperación para derrocar al gobierno cubano".
Rosa María Payá, líder del movimiento Cuba Decide, reaccionó a las declaraciones del canciller cubano y dijo: ”Es una falta de respeto, y un insulto a cada uno de los cubanos que salieron a la calle, que han seguido saliendo a la calle, que están exigiendo la posibilidad de pelear por sus propias vidas".
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El canciller cubano dijo que las protestas en la isla son instigadas desde Florida y que los hechos del 11 de julio no fueron pacíficos. "Nuestra policía actuó con gran moderación y uso mínimo de la fuerza. Las personas que estuvieron detenidas fueron solamente multadas por delitos menores".
Pero las imágenes de brutalidad policial dicen lo contrario. ”Este estilo esquizofrénico de narrar la realidad, pertenece a la propaganda del régimen. Hay más de 500 presos políticos en este momento según las cifras que hemos podido registrar", asegura Payá.
Además de culpar al embargo de la situación en Cuba, Bruno Rodríguez dijo que era una pena que el presidente Joe Biden no hubiera implementado su propia política para Cuba, y abordó la suspensión de las remesas.
"La sanciones son precisamente contra los militares cubanos, contra los dueños del conglomerado militar, o sea, contra los represores, contra los represores que tomaron la decisión de disparar y matar", refiere la líder del movimiento Cuba Decide.
Mientras el canciller cubano advierte que "las remesas no son un asunto político, no es un asunto bilateral. Se trata de familias, seres humanos, derechos humanos".
Local
Una ayuda con la que Rosa María Payá está de acuerdo. "Por supuesto que queremos ayuda, por supuesto que queremos fondos, para el pueblo cubano, pero de manera directa".
En Cuba, han sido convocadas protestas que ya se organizan en varias ciudades para el próximo 20 de noviembre. Al preguntársele si las permitirían dijo que no sabía. Pero los organizadores están decididos a realizarlas.
Leidy Laura Hernández, activista por los derechos humanos acota: "Queremos dejar bien claro que es una protesta pacífica, es una protesta por el cambio en Cuba. Es un segundo 11 de julio. Es pidiendo libertad por los presos políticos, pidiendo un cambio de sistema, pidiendo que Cuba sea libre, elecciones libres, una Cuba democrática verdaderamente".
