La policía de Hallandale Beach se quedó sin equipo SWAT, luego de que sus 10 miembros renunciaron a la unidad la semana pasada, citando preocupaciones de seguridad y el "desdén" de los funcionarios locales por la unidad.
La jefa de la policía, Sonia Quiñones, esperaba que pudieran dialogar y llegar a un acuerdo pero las conversaciones no se produjeron y ahora Hallandale Beach se queda sin equipo SWAT y tendrá que recurrir a la Oficina del Sheriff de Broward cuando lo requiera .
Un video causó indignación de los miembros del equipo SWAT de Hallandale Beach, provocando la renuncia de los oficiales en un memorando el pasado 9 de junio.
En las imágenes se ve algunos oficiales, incluyendo la jefa de la policía, arrodillándose en una reciente protesta por la muerte de George Floyd.
Sonia Quiñones, jefa de policía de Hallandale Beach dijo estar "bien decepcionada con la renuncia de los miembros del SWAT de nosotros, yo hubiera querido tener una oportunidad de hablar con ellos sobre lo que están diciendo” .
En el memo, los oficiales alegan que la comisión de Hallandale Beach les ha faltado el respeto. Señalan que la vicealcaldesa Sabrina Javellana presuntamente se ha arrodillado en protesta para que reabran el caso de Howard Bowe, un afroamericano de 34 años, ultimado a tiros en un operativo del SWAT de Hallandale Beach mientras realizaba una orden de allanamiento en su casa en el 2014.
La alcaldesa de Hallandale Beach, Joy Cooper, dijo que la vicealcaldesa no representa el sentir de toda la comunidad y que espera que el equipo SWAT no renuncie y puedan llegar a un acuerdo con la ciudad.
En la carta de renuncia, los oficiales, además aseguran que están mínimamente equipados.
Este lunes, los ocho oficiales y dos sargentos que presentaron la renuncia, entraron al ayuntamiento de la ciudad para reunirse y entregar sus equipos, ya que seguirán dentro del departamento pero no estarán ligados al SWAT.
Habla la vicealcaldesa
Sabrina Javellana, vicealcaldesa de Hallandale Beach reaccionó a los hechos, y dijo que hay un sindicato nuevo que participó en la redacción de la carta. A su juicio "se mencionan cosas que no son ciertas como la falta de entrenamiento y preparación, la jefa de la policía arrodillándose y yo, como la organizadora de esa protesta”.
Javellana afirmó que la jefa del departamento asistió para asegurarse de que todo estaba bien. Sin embargo, afirma que la protesta tuvo también otro objetivo: "También para ofrecer apoyo a los residentes locales, vecinos y amigos de Howard Bowe que murió a manos del equipo SWAT en 2014. Ellos aún sienten ese dolor".
