Las escuelas públicas del condado Broward lanzaron una iniciativa para rescatar a los estudiantes que no se han registrado para este año escolar. Cientos de profesores y personal de los colegios se tomaron la tarea y salieron a buscar a estos estudiantes casa por casa.
Varios educadores salieron a realizar la importante tarea desde temprano en la mañana, a los miles de estudiantes que hasta el momento no se han registrado para asistir a la escuela en el condado y esperan que este llamado cambie esta situación.
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Por lo que estuvieron tocando puerta a puerta con el propósito de encontrar a los estudiantes que aún no comienzan este año escolar. Es la iniciativa de las escuelas públicas de Broward que con el liderazgo de la superintendente y la ayuda del sindicato de profesores del condado esperan recuperar a miles de alumnos que según ellos no están asistiendo a ninguna institución del distrito.
Liliana Ruido, profesora de Broward, aseguró que “hay muchos estudiantes inscritos en el distrito de Broward y no han aparecido a nuestras clases, a parte de eso, hay muchos estudiantes que están registrados y aparecen un día y otro día no aparecen”.
Ruido ha servido como profesora en Broward por 20 años, por eso se toma muy en serio esta misión", que este sábado dio frutos cuando encontraron a Daniel, un joven que solo le falta un año para finalizar la escuela y que hoy se comprometió a regresar.
Daniel Cuenca, no está registrado para estudiar. “Es un aspecto que de verdad no creía que lo iba a terminar por mi edad y estoy alegre que puedo regresar a la escuela y sacar mi carrera”, acota.
Una decisión que afecta a todos en casa y que a su padre también le agradó escuchar.
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Luis Eduardo Cuenca, padre de Daniel, dice que su “anhelo que él vaya a su escuela para que entre a la universidad porque el muy joven y es importante eso”.
La meta final es reconectar con casi 10 mil estudiantes que no se inscribieron para este curso o si lo hicieron, pero no están asistiendo a clases regularmente, el resultado hasta ahora parece positivo.
Para Liliana Ruido, profesora de Broward, “el mejor regalo es este, llegar a una casa tocar a la puerta y encontrar a un estudiante que necesita ayuda de nosotros y él se siente tan contento porque dice que nosotros somos ángeles que nos aparecimos hoy para prácticamente rescatarlo a él”.
El trabajo del distrito no acaba hoy y mañana cientos de voluntarios más saldrán de nuevo a tocar puertas con la esperanza de encontrar más estudiantes dispuestos a continuar su educación.
