La batalla política entre el alcalde de Hialeah, Carlos Hernández, y el alcalde del condado Miami Dade, Carlos Giménez, tiene hoy su punto más crítico, luego de una carta es quizás el símbolo más notorio de la crisis que los enfrenta.
“Hoy yo pudiera estar aquí con cientos de dueños y familias que dependen de restaurantes en nuestra comunidad, pero yo no estoy aquí para hacer un show”, dijo Hernández, quien le aseguró al alcalde Giménez que cientos de familias en su ciudad ya no aguantan más por cuenta del cierre de los restaurantes.
Miguel Peña, del restaurante La Bodeguita, dice: “Yo respeto mucho al señor Carlos Giménez pero creo que se ha excedido en esta situación con nosotros los restaurantes, porque nos han puesto demasiadas trabas, abre y cierra y así los negocios no pueden funcionar”.
El punto más desafiante del alcalde Hernández es la posibilidad de que tome la decisión de reabrir los restaurantes de Hialeah a pesar de la prohibición del condado.
“Entonces que vengan ellos y que ellos sean lo que tienen que hacer. Pero yo no voy a acostarme siendo culpable por no decir lo que tengo que decir. Yo tengo que cuidar a mi pueblo, yo tengo que cuidar a mi gente”, dijo Hernández.
El enfrentamiento podría llegar a otros niveles, según lo advirtió el alcalde de Hialeah.
