Detenida acusada de robar a hombres

Una de las cuatro mujeres acusadas de drogar y robar a varios hombres a los que conocían y seducían en bares de lujo en el sur de Florida ha sido detenida en Nueva York.
Subhanna Beyah, de 25 años fue detenida este domingo en un negocio en Jamaica, Queens, con una orden de arresto emitida por la policía de Miami Beach, dijo la Policía del Estado de Nueva York.
Fue detenida por la policía de Nueva York y se espera que sea instruida de cargos en la Corte de Queens.
Beyah es acusada de robar joyas y dinero en efectivo a varias personas, entre ellas el jugador de los Gigantes de Nueva York, Shaun Rogers.
La Oficina del Sheriff de Broward había obtenido previamente órdenes de arresto para Beyah, y las otras tres mujeres que parecían estar trabajando con ella: Johnnina Miller, de 25 años, Keshia Clark, de 27 años, y Ryan Elkins, de 23.
Las mujeres está acusadas de seducir a los hombres y robarles dinero, armas, joyas y otros objetos de valor.
Beyah se ha identificado a sí misma como Crystal al menos una vez, dijo la oficina del sheriff. Un hombre se encontró con ella en un restaurante de lujo en Las Olas Bulevard de Fort Lauderdale, un sábado de marzo por la noche y la llevó a su casa en Pompano Beach, donde ella le hizo un cóctel de vodka, según las autoridades.
Cuando se despertó a la tarde siguiente, ella se había ido con $6,000 en efectivo y cuatro relojes - dos relojes Rolex, un Cartier y un Paniere - que estaban en su dormitorio, por un valor de 100,000 dólares.
Rogers había informado del robo de cerca de $400,000 en joyas a la Policía de Miami Beach. El tackle defensivo dijo que sus joyas habían sido robadas de una habitación en el Fontainebleau Hotel.
Según el informe, Rogers y algunos amigos fueron a una fiesta en LIV, donde se encontraron con la mujer, que se fue con él a su habitación del hotel.
Rogers se quedó dormido, y cuando despertó, la mujer se había ido y él no podía entrar a la caja fuerte de la habitación.
Cuando finalmente fue capaz de abrirla con la ayuda de la seguridad del hotel, la mayoría de sus objetos de valor habían desaparecido.
Entre las cosas que faltaban estaba un reloj de $100,000 y unos pendientes, también con un valor de $100,000, según el informe de la policía.
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