La ley conocida como No Diga Gay fue aprobada este martes en medio de protestas.
“Me tomó 30 años queriendo que mis padres estén orgullosos de mí antes que me atreviera a salir a la luz y decir quién yo era realmente”, dijo entre lágrimas el senador demócrata Shevrin Jones. “Veo a esos jóvenes allá afuera y sé el coraje que toma ser ellos todos los días”.
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Por su parte, la senadora republicana Ileana García expresó, “No se trata de señalar a ningún grupo, se trata de devolverle la responsabilidad a los padres y permitir que los niños sean niños”.
La parte más polémica del proyecto de ley establece que la instrucción sobre orientación sexual o identidad de género está prohibida desde el kindergarten hasta el tercer grado.
“Son estudiantes de 5, 6, 7 años con un tópico que todavía no están suficientemente maduros para discutir como instrucción en el aula”, dijo el senador estatal republicano Manny Díaz.
Por su parte, Janelle Pérez, candidata al senado demócrata, dijo que su hija tiene 5 años y dos madres: ella y su esposa.
“¿Qué va a pasar cuando esos niños dibujen la foto de su familia?”, expresó Pérez.
Manny Díaz afirmó que la conversación cuando es iniciada por los niños no está prohibida.
“Esta propuesta no tiene nada que ver con ninguna palabra que se diga, ninguna conversación individual que se tenga entre un maestro, un consejero. Tiene que ver con la instrucción pública de ese niño, de ese nivel de kindergarten a tercer grado”, dijo Díaz.
En otros grados, a las escuelas se les prohibirá abordar el tema de orientación sexual en una forma que no sea apropiada según la edad y desarrollo del estudiante.
Quedará en manos del Departamento de Educación decidir qué es apropiado y qué no lo es. El gobernador dijo que firmará el proyecto de ley y entrará en vigor el 1 de julio.
