El complejo de torres Robert King High lleva casi una semana sin electricidad, a pesar de que alberga a miles de ancianos.
Muchos de ellos abandonan el bastón y se agarran como pueden para subir escaleras. Los elevadores: muertos.
Algunos cuentan con una mano: hijos o conocidos que le suben lo primordial. Pero otros están abandonados a su suerte.
Horas y horas de una planta de diésel que solo alimenta algunos pasillos. Hoy autoridades locales intentaron sofocar la desesperación con hielo, mientras la compañía eléctrica restablece el servicio.