El alcalde de Miami Beach envió el domingo una carta al gobernador de Florida, Ron DeSantis, instándolo a reconsiderar la orden de emergencia que emitió la semana pasada que impide a los gobiernos locales hacer cumplir un mandato de máscara.
"Le insto a que siga los CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) y la opinión generalizada de médicos y científicos, y reconsidere su orden anterior que prohíbe a los gobiernos locales hacer cumplir los mandatos de máscaras individuales", escribió el alcalde Dan Gelber.
"Su orden reciente ha empeorado las cosas, ya que los floridanos razonablemente lo percibieron como una señal clara de que las máscaras son innecesarias", señaló el alcalde.
Gelber también atacó la credibilidad de los expertos en los que se basó DeSantis para justificar su decisión.
La orden de emergencia de DeSantis causó una confusión relativa en los condados del sur de Florida cuando se emitió la semana pasada, ya que los funcionarios locales intentaron adaptar sus órdenes a las nuevas reglas del gobernador sin abandonar por completo las recomendaciones estándar de los CDC para el distanciamiento social y cubrimientos faciales forzados.
La decisión recibió algunas críticas del Dr. Anthony Fauci, quien advirtió que el cambio le generaba preocupación. "Es muy preocupante para mí. Cuando se trata de la propagación de la enfermedad y se tiene el tipo de entorno donde la gente se reúne , especialmente sin máscaras, realmente estás buscando problemas", advirtió el especialista en enfermedades infecciosas.
Los alcaldes Carlos Gimenez y Dale V.C. Holness también expresaron su preocupación por eliminar todas las regulaciones y advirtieron que mantenían la solicitud de uso de máscaras en los condados.
“Esperamos que el gobernador nos permita tener restricciones más profundas que el resto del estado. Tenemos una mayor propagación del virus en el sur de Florida que en otras partes del estado ", dijo el alcalde del condado de Broward, Dale Holness, a WLRN la semana pasada.
Los condados todavía están alentando a todos a seguir las pautas de los CDC (uso de cubrimientos faciales, distanciamiento social) tanto como sea posible, mientras más negocios pueden abrir, incluyendo los bares y restaurantes, que pueden tener más flexibilidad en la cantidad de clientes que pueden permitir.
