Un grupo de activistas pro inmigrantes protestaron cerca de las instalaciones del centro de detención de Krome por el supuesto trato que le dan a detenidos musulmanes.
Wilfredo Ruiz, del consejo de relaciones islámico-americanas, dijo que “ha habido querellas en organizaciones religiosas donde se les está sirviendo comida expirada y con cerdo y esto viola su credo religioso”.
La comisionada de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, envió una carta a Krome donde expresa su preocupación sobre estas alegaciones y solicita que se investigue a fondo.
“Y eso es lo que pretendemos con estas manifestaciones, que se respete la religión de los detenidos. Eso protege no tan solo a los musulmanes que estan aqui, a los judios, santeros”.
Gabriela Duarte de la coalicón de inmigrantes de Florida confesó que estaba “demandando a ICE que no solo deje de darles puerco sino que los libere porque ninguno debería estar en un centro de detención donde sus derechos son violados”.
Cristopher Colindres, activista pro inmigrantes, confiesa estar “representando a la comunidad inmigrante porque ahorita mismo le están quitando las cosas reproductivas de las mujeres”.
El joven se refiere a acusaciones que ocurrieron en Georgia, no en Florida. En ese caso los abogados alegaron que las mujeres inmigrantes fueron abusadas con procedimientos innecesarios por un ginecólogo en un centro de detención de ICE.
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A lo que ICE respondió en un comunicado:"el servicio de inmigración y control de aduanas de EEUU no comenta sobre los asuntos presentados a la oficina del inspector general, que proporciona supervisión y rendición de cuentas independientes dentro del departamento de seguridad nacional de EEUU".
"ICE toma todas las acusaciones en serio (…) las acusaciones anónimas, no probadas, hechas sin ningún detalle específico que verifique los hechos, deben tratarse con el escepticismo apropiado que merecen", se podía leer en dicho comunicado.
