Los ánimos se caldearon cuando manifestantes que exigen la renuncia del gobernador Ricardo Rosselló le lanzaron drones y otros objetos a policías de la unidad anti-motines.
En medio del enfrentamiento, intentaban entrar a la fortaleza, que en Puerto Rico es la residencia oficial del gobernador. Fueron momentos de mucha tensión en los que hubo actos vandálicos, y rompieron los cristales de una patrulla de policía. A lo que los agentes respondieron lanzando gas pimienta.
Las impresionantes imágenes que recorren el mundo son parte de la crisis política que se vive en la isla. Primero a mediados de la semana pasada arrestaron y les presentaron acusaciones por corrupción a funcionarios que estuvieron en la administración Rosselló.
Luego la gota colmó la copa este sábado cuando se revelaron 889 páginas de un chat en que participaron el gobernador y miebros de su gabinete con un lenguaje obseno contra las mujeres y con expresiones homofóbicas. Hasta se burlaron de los cadaveres acumulados en el instituto de ciencias forenses después del huracán María.
Mientras seguían las protestas en las calles y frente a su casa, Rosselló reapareció públicamente este domingo en una iglesia cristiana. Y pidió perdón por los errores cometidos, oraron por él y más tarde reafirmó por escrito que no va a renunciar a su cargo.
El caucus lesgislativo de su propio partido rechazó este domingo por la noche iniciar un proceso de residenciamiento. Pero a medida que pasan las horas, crece la polémica.
Hay pugna dentro del partido nuevo progresista, porque hay legisladores que antes aplaudían a Rosselló y ahora no confían tras leer el contenido del chat.
En exclusiva a Telemundo 51, el secretario del partido de gobierno Rafael Rivera Ortega defendió al gobernadora, quien ya había expresado su intención de aspirar a la reelección en el 2020.
